Mañana del domingo 24. Mientras leo la prensa recibo numerosas llamadas de hoteleros y hosteleros con larga tradición, muy preocupados por los excesos y el descontrol que se ha producido a lo largo de la pasada noche en Portonovo y Sanxenxo.

Mientras la realidad llega a mis oídos a través del móvil, mis ojos observan con asombro una foto (la cual reproduzco) de la Concejala de Seguridad Ciudadana alardeando en la prensa de un nuevo aparato para el control del consumo de drogas. Sin duda será muy útil a la Policía Local, pero evidencia que la concejala vive en una realidad virtual y confunde el grano con la paja.

No tenemos nada personal en contra de Vanessa, incluso hace un año nos parecía uno de los miembros más preparados de un gobierno que siempre hemos considerado muy flojo. Pero es que la concejala lleva unos meses que hace aguas por todos lados. Un fiasco la contratación de socorristas que nos ha costado la pérdida de 3 banderas azules más. La seguridad brilla por su ausencia en la movida nocturna, entre otras razones porque la Policía Local no dispone del personal, ni de los medios para controlar la situación. Por si fuera poco, la concejala de Seguridad se ha dedicado en los últimos meses a mantener enfrentamientos públicos con los representantes de los trabajadores municipales. Y del caos del tráfico ya hablaremos.

Pero el máximo responsable de lo que está ocurriendo es el Alcalde. O pone remedio urgente a la situación, o ésta se lo va a llevar por delante. No se puede jugar con la reputación de Sanxenxo. Nos arriesgamos a que cualquier día aparezcan imágenes muy negativas de Sanxenxo en los informativos de las televisiones. Es una pena que un verano que está siendo un éxito de ocupación, pueda quedar empañado por la dejación del Alcalde y la incompetencia de la concejala de Seguridad Ciudadana.