Hoy el puerto deportivo pasa por momentos difíciles por los problemas de seguridad que genera la movida y decisiones del tripartito tan incomprensibles como pretender convertir la plaza pública en un parking, lo que supondría la degradación de la zona.

Pero más allá de cuestiones coyunturales que son reversibles, el puerto deportivo se ha convertido en uno de los principales motores económicos del Concello, como demuestran los siguientes datos: el presupuesto de Nauta para el 2016 establece unos ingresos de 1.747.000 €, que si le restamos 1.507.000 € de gastos arroja unos beneficios de 240.000 € que van a la caja de todos.

Dato que deberían tener muy en cuenta los que tacharon el proyecto de megalómano y así serán más prudentes cuando proponemos proyectos muy parecidos, con fórmulas de financiación similares. Pero ya se sabe que la incompetencia y la envidia van de la mano.

El puerto deportivo paga 65.000 € anuales de IBI, que también van a la caja de todos (un dato que estoy seguro que no conocíais). Además, el presupuesto de Nauta este año destina 200.000 € a la compra de un nuevo travel-lift, lo que quiere decir que los beneficios podrían ser todavía mayores, porque es evidente que no todos los años se sustituye el travel-lift.

Todavía más importantes son los 28 empleos directos que genera Nauta, 16 todo el año y 12 más en la temporada alta. Pero, más allá de los puestos de trabajo que dependen de Nauta, la empresa municipal, el puerto en su conjunto genera más de 150 empleos, entre servicios náuticos, comercios, restaurantes y locales de copas.

Nadie sensato puede negar que la compra del puerto deportivo ha supuesto un gran beneficio, en términos económicos, por los espacios peatonales que ha generado y porque ha permitido relanzar el prestigio de Sanxenxo como destino turístico y náutico. Más allá de las malas decisiones que pueda tomar un gobierno concreto, el puerto deportivo volverá a acoger eventos de gran repercusión, como fue la Volvo Ocean Race, que relancen la imagen y el prestigio de Sanxenxo. Ideas no nos faltan.